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Entrenar habilidades de movimiento en atletas jóvenes puede ayudar a configurarlos para una vida de participación y actividad en el deporte y el ejercicio. La investigación ha demostrado que los jóvenes que carecen de buenas habilidades de movimiento, o la alfabetización física son a menudo más propensos a retirarse de la actividad física y el deporte (Kirk, 2005). En contraste, el desarrollo de una gama de movimientos humanos básicos, habilidades fundamentales y habilidades deportivas fundacionales da a los jóvenes las herramientas para participar en estilos de vida saludables y activos (Ellerton, 2018).

El desarrollo de habilidades de movimiento fundamentales aparece en casi todos los modelos de desarrollo de atletas a largo plazo. Debemos entender para el desarrollo de estas habilidades que los jóvenes atletas y niños todos maduran y desarrollan a diferentes ritmos, aunque siguen las mismas secuencias y fases de aprendizaje, sólo deben progresar a través de las etapas de desarrollo de una habilidad cuando Apropiado.

Incluyendo regresiones y progresiones creativas, variadas, desafiantes y divertidas para el ejercicio pueden ayudar a desarrollar estas habilidades apropiadamente para cada individuo. Dos jóvenes atletas de la misma edad pueden estar en niveles completamente diferentes de competencia de movimiento basado en una serie de factores. En estas situaciones, explorar el nivel correcto de movimiento a realizar en esa etapa para cada individuo es esencial para sentar las bases para las variaciones progresivamente más desafiantes de esa habilidad o ejercicio a medida que maduran

Vea a continuación algunas de las variaciones de ejercicio y progresiones en la aplicación de entrenamiento de sistema de rendimiento AMAT para una serie de patrones de movimiento fundamentales comunes.

La mayoría de los programas de identificación de talentos y de desarrollo deportivo para jóvenes de élite a menudo agrupan a los jugadores basándose en su edad cronológica para la formación y la competencia (Baxter-Jones, 1995). Sin embargo, existen grandes diferencias individuales entre la edad cronológica y la edad biológica de estos atletas juveniles. El camino hacia la madurez de cada individuo difiere, siguiendo patrones de crecimiento no lineal y diferenciándose en términos de tiempo, tempo y magnitud. A menudo alrededor de la época de la velocidad máxima de la altura (tasa de crecimiento máximo) esto crea un disturbio en la función motora y la coordinación, y un riesgo creciente de lesión mientras que los atletas se ajustan a los cambios en sus cuerpos.

Estas diferencias inter-individuales en la maduración pueden tener un efecto profundo en muchos factores de la implicación y de la progresión de un atleta en programas de desarrollo de la juventud de la élite. A través de la investigación en la que hemos participado hemos identificado que la velocidad máxima de la altura (PHV) y la madurez afectan sustancialmente las puntuaciones de pantalla de movimiento funcional (FMS) a favor de jugadores más maduros (portas et al., 2015), que la maduración puede causar una sesgo innecesario en la asignación de posiciones de juego dentro del fútbol juvenil con jugadores más pesados más altos asignados roles/posiciones defensivas (Towlson et al., 2017) y que los atributos y características físicas muestran tasas distintamente diferentes de desarrollo basado en las influencias individuales de la maduración (Towlson et al., 2018). Por último, nuestros datos han mostrado un fuerte sesgo relativo al efecto de la edad relativa (RAE) en los programas de desarrollo futbolístico, particularmente en el momento de la PHV (Lovell et al., 2015).

La investigación en la que hemos participado sugiere que los programas de desarrollo deben considerar las diferencias en el estado de maduración entre los individuos y sus influencias en las habilidades de movimiento, competencia técnica, características posicionales y desarrollo y sus implicaciones, para evitar el abandono innecesario y la desselección de los jugadores dentro de los programas de desarrollo de la juventud.

Por esta razón, es fundamental que estos programas de desarrollo evalúen el estado de maduración de sus atletas juveniles. Las limitaciones presupuestarias en la mayoría de los programas de desarrollo de la juventud previenen las evaluaciones de rayos x "estándar de oro" de la edad esquelética, así como las variables antropométricas y las ecuaciones de regresión específicas del sexo (Mirwald et al., 2002, Khamis-Roche, 1994, Moore et al., 2015, Fransen et al., 2017) son un método alternativo más popular para predecir la madurez somática.

A la luz de esto, como una nueva característica y la adición a nuestra Sistema de rendimiento AMAT ahora hemos desarrollado software que nos permite recopilar de forma rápida, precisa y fiable variables antropométricas a través de la tecnología de rastreo de movimiento 3D. Esta información puede proporcionar automáticamente evaluaciones de maduración individuales para cada atleta, negando la necesidad de que usted o su personal para hacer mediciones manuales que consumen mucho tiempo sobre una base regular.

Para obtener más información, visite System.amatperformance.com

Durante la pubertad, se producirá un rápido aumento de la longitud de las extremidades como resultado del brote de crecimiento del adolescente. Los músculos crecen más despacio en comparación con las extremidades, la persona tendrá que acostumbrarse a su nuevo cuerpo. La disminución temporal del rendimiento o la interrupción de la coordinación motora se denomina período de "incomodidad adolescente" (Philippaerts et al., 2006). Como resultado del acelerado crecimiento hay una necesidad de más atención hacia las intervenciones nutricionales y físicas para ajustarse a las nuevas exigencias del cuerpo. Con las extremidades que crecen más rápidamente los desafíos de la movilidad y de la coordinación son comunes ocurrir (Malina et al., 2004).

La disminución de la movilidad y la coordinación también podrían transferirse a habilidades fundamentales. Las habilidades fundamentales del movimiento, que eran cómodas antes podrían ahora parecer difíciles. Ryan y sus colegas (2018) demostraron que los jugadores de fútbol jóvenes durante el crecimiento se desempeñaron peor durante los movimientos funcionales en comparación con los jugadores que ya habían pasado por su crecimiento acelerado. Como ejemplo, una persona antes del inicio de la pubertad podría haber realizado una cusquera de rango completo con facilidad. Ahora, con restricciones a las áreas conjuntas relevantes para el desempeño en cuclillas (por ejemplo, tobillo, cadera) debido a los cambios en el cuerpo, el individuo ahora puede luchar para realizar la sentina a toda profundidad como antes.  

Además de los desafíos con la movilidad y la coordinación, los adolescentes durante su crecimiento acelerado también podrían ser propensos a más lesiones. Las placas de crecimiento en el extremo de los huesos largos todavía no están completamente osificadas y necesitan ser protegidas para el crecimiento normal. Una cuidadosa monitorización de la carga física, el desarrollo de la movilidad, la coordinación y las habilidades fundamentales del movimiento ayudaría a guiar a un joven atleta a través del período de "incomodidad adolescente" de forma segura.

El modelo de desarrollo físico juvenil establece que el desarrollo de habilidades fundamentales del movimiento debe formar parte de programas de desarrollo físico en todas las edades durante la niñez y la adolescencia (Lloyd y Oliver 2012). El desarrollo de habilidades de movimiento fundamentales podría ayudar en contra de la incomodidad adolescente. Nuestro sistema AMAT performance proporciona programas de habilidades de movimiento fundamentales individualizados y específicos para la maduración para cada atleta joven para enfrentar cualquier desafío de madurez relacionado con las habilidades de movimiento y para tratar de protegerse de las lesiones.

Las habilidades de movimiento se dicen que son los bloques de construcción que proporcionan una base para las habilidades especializadas y deportivas específicas que se requieren en una variedad de actividades físicas. La decisión sobre cómo medimos estas habilidades de movimiento será dictada por el propósito de lo que estamos evaluando. ¿Qué información queremos recopilar y por qué? El propósito puede ser agrupar un conjunto de individuos, identificar a los que corren el riesgo de lesionarse, crear programas educativos o de desarrollo, monitorear cambios en las habilidades de movimiento a lo largo del tiempo, proporcionar retroalimentación al intérprete o predecir el desempeño en el futuro (Burton Y Miller, 1998).

Para medir la habilidad de movimiento desde una perspectiva cuantitativa, generalmente implica asignar una puntuación de resultado al movimiento. Las unidades arbitrarias categóricas se utilizan a menudo pero pueden carecer de contexto relacionado con el movimiento, las puntuaciones significativas objetivas suelen ser preferidas como las distancias o los tiempos. Estas puntuaciones o resultados se pueden utilizar para comparar con un grupo normativo, esta información puede permitir la comparación de un individuo contra sus pares cronológicos o biológicos y puede ayudar a identificar y distinguir aquellos con dificultad en ciertos movimientos patrones (manos, 2002).

En la medición de estas habilidades debemos tratar de tener en cuenta las tres construcciones de las habilidades fundamentales del movimiento: locomoción, control de objetos y estabilidad (Rudd et al., 2015). Los movimientos de medición en cada uno de ellos nos dan una visión más representativa de la capacidad de movimiento general de un individuo. Además de esto, como se discute en el estudio de Clark et al., (2016), las variables cinemáticas tridimensionales pueden diferir en individuos hasta un 65%. Así, mientras que la actividad general y las puntuaciones pueden ser similares, los perfiles de movimiento individuales y las características en los niños son muy variables.

Durante el desarrollo y futuras incorporaciones a nuestro producto hemos intentado y seguimos teniendo en cuenta muchos de los factores mencionados anteriormente. Queremos evaluar las habilidades de movimiento utilizando AMAT performance para proporcionar retroalimentación individual, para monitorear los cambios en el movimiento a lo largo del tiempo, para crear programas de desarrollo de movimientos efectivos y educativos, para identificar potencialmente a aquellos en riesgo de lesiones, y para permitir comparación de los resultados dentro y entre los diferentes grupos.

Con el fin de hacer esto desarrollamos nuestro producto para proporcionar automáticamente puntuaciones cuantitativas de rendimiento de movimiento, con análisis biomecánico 3D adicional que se pone a disposición de los practicantes y entrenadores para entender la variabilidad en cada movimiento entre individuos. Para más información sobre nuestro producto, visite por favor nuestro Web site amatperformance.com

El movimiento en el deporte es dinámico, complejo y aleatorio en la naturaleza. Para evaluar cómo el movimiento podría transferirse de una configuración de práctica a una configuración deportiva aplicada, debemos evaluar patrones de movimiento complejos y de cuerpo completo que incluyan toda la cadena cinética. Uno de estos ejercicios, la sentina de arriba, se utiliza comúnmente en métodos de cribado bien establecidos. La evaluación de la calidad del movimiento a través de la cuclillas superior desafía las estructuras clave desde una perspectiva de movilidad y estabilidad como los tobillos, las caderas y la espina dorsal torácica (Bishop et al., 2015).

Se dice que la buena técnica durante la sentón de arriba requiere las siguientes capacidades físicas (Cook, 2010):

• Movilidad de la articulación Talo-crural
• Estabilidad de la rodilla
• Movilidad de la cadera
• Control lumbo-pélvico
• Movilidad Thoraric
• Estabilidad de la articulación Gleno-humeral

Mediante la utilización de estas pruebas y el examen de toda la cadena cinética, no sólo podemos identificar e intentar corregir las compensaciones de movimiento para los movimientos complejos de cuerpo completo, como la sentante, sino también las compensaciones correctas que pueden afectar a los movimientos más agudos y habilidades en cada articulación. Por ejemplo, la espina dorsal torácica y la salud del hombro es clave en los deportes que requieren movimiento de arriba y también tirar/coger habilidades y eventos. La investigación también muestra que las cuestas de arriba desafíe aún más los músculos abdominales anteriores en mayor medida que una variación en cuestas más regresadas, como la sentada de espalda (Aspe y Swinton, 2014).

Por esta razón, la cuclillas de arriba no sólo nos da una idea de la capacidad de un individuo para producir y transferir eficazmente la fuerza (ver blog anterior), pero también nos puede dar ejemplos de compensaciones de movimiento en varias partes de la cadena cinética.

Durante nuestra evaluación de la sentina en el sistema AMAT performance, la técnica de un individuo se evalúa de forma automática y precisa a través de la posición de la barra (rotación del hombro y desplazamiento de la barra anterior al cuerpo), posición del tronco (ángulo del tronco en el plano, centro de masa dentro de la base de apoyo) y análisis de las extremidades inferiores de los ángulos de tibia tanto en el plano sagital como frontal para evaluar el desplazamiento medial de la rodilla y la movilidad del tobillo. Esto nos da una imagen completa del movimiento de un individuo que se mueve para los movimientos complejos, del lleno-cuerpo que son aplicables a muchas habilidades deportivas específicas.

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